lunes, 17 de marzo de 2008

Aprendiendo


Deseos enmascarados

en palabras escondidas.

Daños sin sentido,

sin saber bien el por qué.


Diferencias generacionales

problemas morales.

Principios confundidos,

vidas dispares.


No sé en que punto te perdiste,

pero te quedas sólo y ni lo ves.

Respondes sabedor de tu pérdida,

nunca fuiste lo que un día pensaste.


La vida te lo facilitó,

no supiste aprovecharla.

Mucha teoria y poca práctica.

No siempre estaré ahí.

Empiezo a desaparecer.


Protagonista de nada,

amigos inexistentes,

te sobran las palabras,

y los hechos no aparecen.


En sexto lugar me pones,

caiste al último en un instante.


Demasiados intentos para

ser un hermano no elegido.

Duele, sí. Pero aprendo.


Ya no hace falta que

plastifiques nada,

te enteraste que era mío,

y perdió el interés para ti.


Detalles, y detalles

que se acumulan y acumulan.

Y me cansan y me agotan,

y empiezan a no dolerme.


Me dices que no te entiendo,

¿acaso entiendes tú?

once y media,
y aún dudabas si llamarme.

Hasta en eso fuiste egoista.

Protagonista de miserias,

de abrazos hipócritas.


Estoy aprendiendo a

prescindir de tu presencia.

Algún día lo conseguiré.


4 comentarios:

Soy ficción dijo...

Es una pena, q te defrauden es duro, las traiciones al alma son terribles, pero aprenderas a olvidar y solo queda ese consuelo...

J.Himilce dijo...

Hola Chus! Tus desahogos siempre me impresionan por lo "rota" q escribes... te salen de dentro... y llegan dentro del q escribe tmb.

Este especialmente me llegó a mí...

Un beso.

J.Himilce dijo...

Ais, queria decir q tmb llegan dentro del q te lee... es q es mu temprano... y uno está más tonto de lo normal, q ya es mucho.

¡Buenos días!

Divagando dijo...

nausica: Duele mucho si, tienes toda la razón. Pero ya cicatrizará y dejará su huella y esta vez, no quiero ni olvidarlo. Esta vez, no.

J. Himilce, guapeton, no sé que decirte, la verdad es que a mi me vienen bien estos desahogos, pero no querría que sufriera nadie, y menos tú. Muackss.